lunes, 27 de junio de 2016

Ensayo "El fin justifica los medios"


 ¿El fin justifica los medios?


Siglos después de que el famoso Nicholas Maquiavelo dejo esta frase, en la obra titulado “El Príncipe”, escrita en 1513 y publicada tras su muerte en 1532, ha sido objeto de críticas y disgustos para algunos; categorizado como una “obra del diablo”, guiados primordialmente por prejuicios de índole moral y religiosa, como William Shakespeare quien lo denomina “el sanguinario Maquiavelo”, o como una apología de la tiranía, tal cual declara Diderot. Y para otros, a su favor como Benito Mussolini quien tilda a Maquiavelo como un “teórico del Estado totalitario”, han visto en la obra un exhorto para la unificación de la patria y la defensa del territorio nacional. Aún hoy en día hay dudas y controversia sobre si esta frase es buena dentro de los valores de nuestra sociedad o si tiene como intención dejar un mensaje precisamente maquiavélico (negativo). Naturalmente esta frase gira alrededor de una meta, una meta que se busca alcanzar, pero la pregunta es: ¿El fin realmente justifica los medios? ¿Hay alguna excepción?


Para iniciar, me es pertinente definir los siguientes conceptos: Fin, según la (RAE) es la interrupción o cese de un proceso o de su existencia; también hace alusión a un objetivo y, Medio, puede referirse al camino o vía que conduce hacia algo.

Hay que resaltar, esta frase tiene su contexto y tiempo, es evidente que en el momento en que fue dado a la luz; la vida, la sociedad y la moral en si no se conceptualizaban igual que ahora. Nuestro mundo o nuestra sociedad está en constante evolución. Antes había monarquía, dictadura, monopolio y ahora simbólicamente la democracia, la competición en lo mercantil por mencionar algunos. También se ha dicho que la intención de Maquiavelo con esta frase era justificar los actos de los dictadores de su época, que en busca de un bien común hacían lo que fuera necesario.

Tomaré cuatro ejemplos para ilustrar este tema:

Basando en la película “el juego de Ender” un grupo de investigadores usaron a niños inteligentes para una horrible batalla o guerra que metió fin a otro planeta, con el pretexto que fuera un juego. Este comandante uso a los niños con el fin de proteger a la humanidad, el planeta tierra; pero por medio de engañar o mentir a los niños que era un juego, ellos no tenían consentimiento informado sobre dicha batalla cual no les resultó gracia al conocer la verdad.
Basando en la película “siete almas” un hombre que quiso ayudar a la gente, se aparento ser un oficial del gobierno con falso credencial para ayudar a siete personas (almas) con distintos problemas. Su fin era ayudar que es bueno pero uso un medio engañoso que va en contra de lo ético-moral.
Basando en la película “la decisión de Anne 2009 o la decisión más difícil” una madre quiso que una de sus hijas fuera donadora de órgano a otra (hermana) con el fin de salvarla. La madre tenía como fin u objetivo de salvaguardar a su hija que por desgracia ella no podía ser la donadora, pero su medio era imponer o exigir a la hija menor que fuera donante. Caso extremo que va en contraste de los cuatro principios éticos (autonomía, justicia, beneficencia y no maleficencia),
Basando en “el juego de ajedrez”, un juego basado en la capacidad de ver más allá de lo que está pasando en el momento, ver hacia el futuro. Muchas veces es necesario sacrificar algunos peones, para salvar a piezas más importantes y que luego nos podrá traer la victoria. Incluso en ocasiones se ve como los jugadores sacrifican piezas importantes; caballos, torres, en ocasiones hasta la reina, todo con tal de asegurar la victoria. Su fin es ganar y usa distintos medios muy arriesgados como las torres, la reina.

      Podemos ver que en cada caso, son distintos los medios usados en relación a los fines, cuales permiten la controversia, diferentes puntos de vista. Pero viéndolo con un pensamiento crítico e imparcialidad, dejando al lado lo personal-emocional obtendrás la respuesta.

“Todos los métodos son buenos para obtener información”, declaró el senado EE.UU, en junio 2016. Literalmente es volviendo a lo mismo que venimos hablando en este trabajo.
“Que las leyes se hacen para romperse” palabras de los corruptos. Quienes buscan sus conveniencias. 
Pienso que, no importa lo que diga o haga la gente, que si el fin justifica o no justifica los medios, si no es hacer lo que te corresponde hacer basando siempre en la ética.

Considerando el último ejemplo ilustrado anteriormente, aunque la vida no es un juego, pero se necesita jugar para vivir. Con esto, me refiero a jugar nuestros pensamientos, razonamientos, inteligencias, emociones, capacidades, oportunidades, etc.; para ser mas resilientes y adaptables. Cualidades que nos hacen diferentes de los otros especies; Recuerda que la adaptación es una cualidad única que poseemos los seres humanos. Quien no juega no pierde tampoco gana. pero dejemos de ser espectadores, juegan pero sin mentiras, sin engaños ni estafas.

Entonces podríamos decir que las acciones que realicemos deben de estar siempre encaminadas hacia nuestro objetivo final, no importa si es necesario de sacrificar el tiempo, dinero, fuerza, oportunidades, etc; o de tomar algún comportamiento que tal vez no sean bien vistas a los ojos de los demás (no asiste un domingo a misa, no sale los fines, usar el mismo coche durante años), con lo que logramos nuestro objetivo.

A la sociedad no le importa cómo lo hace uno para lograr ni el camino que tomas para hacer algo sino es el resultado que le importa.  La sociedad no necesita saber todos los problemas que habías enfrentado para lograr un objetivo, los sacrificios que hayas hecho, sino, el resultado que les interesa. Para muchos e incluso miembros de la familia, no les importa cuál camino tomas, en lo que sepas llegar o traes el resultado.

Conclusión

En la vida, lo que hagamos y las acciones que tomemos si importan, en el ajedrez lo único que importa es ganar y debido a que el ajedrez es solo un juego y tiene un único objetivo. Sin embargo, en la vida no solo importa el objetivo final, sino también todo lo que llevamos a cabo para realizarlo; ya que es posible que aun cuando lo hayamos logrado o ganado todo, no valdrá la pena. Has pensado en cuántos políticos y/o empresarios millonarios que están en la cárcel por los medios que habían usados, y ahora, digamos que no vale la pena, ya que no pueden disfrutar de sus logros.
 
Pienso que una persona sea física o moral que se apega con esta ideología “El fin justifica los medio” muestra una forma de comportamiento egoísta que busca el interés propio. Se podría decir que, lo que se hace para llegar a la meta propuesta tiene que tener la misma honradez que la meta en sí; Por ello, pienso que el fin NO justifica los medios porque por ejemplo: Un país querría lograr la paz y para hacerlo mataron a todos los que amenazaban la paz, o que para terminar con el sida maten a todas las personas con sida. Éticamente eso no estaría bien. El fin no justifica el medio en estos casos; a excepción, el fin justifica el medio en cuando tu(s) medio(s) o vía utilizada no compromete o afecta a las normas éticas y/o no obstruye el medio de otros.

En fin, les dejo con esta reflexión: Nadie escogió cómo, cuándo y dónde nacer. Nadie tiene la culpa de ser pobre o rico, de vivir en un país pobre o rico.  Por eso tú que no tienes, acéptalo, trabaja para superarse; no maldice ni odia al que tiene, no sabes que tanto ha pasado, ha sufrido antes de que tenga esa chispa de riqueza que tu percibes, además tú no sabes que tanto ha trabajado incansablemente su familia. Tu que tiene la oportunidad de trabajar, hazlo con ganas. Si tú tienes que trabajar duro, día y noche para conseguir el pan y ves que otro ni trabaja y vive mejor que tú, no juzgues, porque no sabes su pasado. Antes de juzgar o menospreciar a alguien tendrías que saber si tuvo la misma oportunidad que tú.

¡Cambia de actitud y haga lo que te corresponde (lo que te toca hacer) sea tu medio!



Fuente: 
Edición electrónica, escuela de filosofía universidad ARCIS

(Elaboración propia)



lunes, 6 de junio de 2016

TIPOS DE IGNORANCIA

                                                          

Una de las palabras más despreciada por la gente es: "ignorante". Si no me crees, trate de decir algún día a una persona en la calle o donde sea, que es ignorante; lo expondrá en la mayoría de los casos de represalias o hasta recibir unos puñetazos. ¿Por qué tal comportamiento? si al fin de cuenta, todos somos ignorantes. Dios no deja de existir porque lo ignoras, las estrellas no dejan de existir porque no las ves y, las cosas no dejan de suceder porque lo ignoras. Hasta nuestro propio idioma materno no lo hablamos al cien por ciento; se ha de ignorar ciertas terminologías o vocabularios específicos según el tema en cuestión; Una verdad que muchas personas ignoran. Como dijo Descartes, "Todo el mundo cree tener suficiente sentido común". Bueno, les voy a hablar sobre lo que es la ignorancia y su clasificación según distintas perspectivas.

La ignorancia puede definirse de estas maneras:
  • Una falta general de instrucción y del saber intelectual.
  • Una falta de conocimiento o experiencia en un ámbito dado.
  • El hecho de no saber o no estar al tanto de algo.


Según algunos autores,  la ignorancia se clasifica en dos tipos: Uno en el que se excusa la ignorancia, y otro donde no lo excusa. Específicamente son: la ignorancia primaria (la natural) donde la persona reconoce que no sabe y la ignorancia secundaria, la más grave, donde la persona no reconoce que no sabe.

Otros logran clasificar más amplia de la siguiente manera: (Los tres primeros tipos de ignorancia podrían reflejarse como primaria y los otros cinco como secundaria).

  1. Ignorancia Excusante: Es involuntaria y se presenta con total ignorancia, o sin capacidad racional. p.e: un demente, un psicópata.
  2. Ignorancia Racional: En este tipo, la aceptación de la ignorancia es eminentemente racional. Se recubre la ignorancia con el velo de la indiferencia. p.e: Soy ignorante sobre temas de astronomía o mecánica. Pues, aparentemente es normal ya que mi carrera no tiene nada que ver con esas.
  3. Ignorancia Inevitable: A medida que aumenta el saber de los seres humanos, mayor es su asombro ante lo ignorado y mayor su tendencia a refugiarse, en última instancia, en el modesto, pero sensato campo de la docta ignorancia. La especialización en unos temas trae como consecuencia el aumento de la ignorancia de otros. En este aspecto, la ignorancia alienta la esperanza de aprender en el futuro. (p.e: un médico general y un médico especialista en radiología)
  4. Ignorancia Presuntuosa: Es aquel que presume el conocimiento de algo que desconoce. Se podría resumir en la actitud de negar la posibilidad de conocimiento en aquellos campos donde su metodología resulta epistemológicamente inaceptable. p.e un político. 
  5. Ignorancia Culpable: Resulta del auto-engaño. Requiere que sea fácilmente superable y que se suponga que su superación puede tener un efecto desagradable. Solo se refiere a asuntos morales importantes. El autoengaño es una forma moralmente inadmisible para eludir la responsabilidad. p.e: Supone que lo aman, y opta por no preguntarlo, pues prefiere vivir pensando que la respuesta será positiva.
  6. Docta Ignorancia: El conocimiento consiste en una cierta comparación entre lo conocido y lo desconocido. Si logro conocer la capacidad de mi ignorancia, por lo tanto seré más docto. Hace referencia más a una disposición intelectual que a un acervo de conocimientos. Entonces se observa como una disposición por reconocer las limitaciones de todo saber racional.
  7. Ignorancia Conjetural: Formulamos conjeturas acerca de la realidad que luego sometemos al test de su posible falsación. Nuestras soluciones son simples conjeturas tentativas que pueden ser desafiadas y reemplazadas por soluciones alternativas, superiores.
  8. Ignorancia Querida: Hay cosas que preferimos no saber. Este tipo de ignorancia también se relaciona con el conocimiento que queremos construir desde la academia y que proyectamos en el tiempo. p.e Todos sabemos que vamos a morir, pero preferimos evitar saber cuándo será. Imaginemos cómo cambiarían nuestras vidas si desde pequeños supiéramos en qué fecha y en qué condiciones moriremos.  

Otra clasificación aceptable (que más me gusta) lo resume en tres tipos:

1. El no saber lo que se debiera saber: soy estudiante y desconozco o no sé la importancia de leer, reflexionar y/o investigar.

2. El no saber lo que no se debiera saber: soy estudiante de psicología, no sé nada sobre la mecatrónica o la astronomía.

3. El saber mal lo que se sabe: Es muy claro, conozco o tengo la información pero no sé cómo y cuándo aplicarlo o usarlo de forma adecuada.

         En fin, la ignorancia es un hecho fundamental para darnos cuenta de que todavía estamos en proyectos aún sin terminar, que somos imperfectos. No debería haber vergüenza en reconocerse como ignorante; porque no hay nadie que pueda presumir de saberlo todo. Está toma de conciencia de nuestra profunda ignorancia nos debe de llevar a un aprendizaje diligente de lo que queremos saber y evitar también de hablar para no decir nada.



Algunos pensamientos:
"Celui qui ignore que son lit est dur dort bien."
(Aquel que ignora que su cama es dura duerme bien)

"L'ignorance, c'est comme la science, ça n'a pas de bornes."
(La ignorancia es como la ciencia, esta no tiene límite)  
            
"Celui qui confesse son ignorance la montre une fois; celui qui essaie de la cacher la montre plusieurs fois."
(Aquel que confiesa su ignorancia la sobrepasa una vez; pero el que trata de esconderla la sobrepasa varias veces)


                                           Recuerda: “Escucha siempre, habla poco y obra bien”